El trabajo, tenga o no tenga usted ingresos, es uno de los fundamentos de su vida. Seguramente se esté preguntando, qué es lo que considero yo “trabajo” atreviéndome a realizar afirmaciones con las que puede estar (o no) tan en desacuerdo.
Trabajo simplemente es cualquier actividad física o mental tendente a un fin. Realiza trabajo, innegablemente, dentro de una oficina, una fábrica o una tienda, ya sea cargando cajas, realizando esfuerzo manual, o atendiendo a los clientes.
No obstante, es evidente (por lo menos para mi) que también realiza trabajo fuera de su lugar de empleo. Que también las actividades no remuneradas pueden ser consideradas trabajo.
Sin ir más lejos, cuando se apunta a un curso ¿no realiza un esfuerzo, por lo menos intelectual, en superar las pruebas que le plantea la consecución del título o certificado que está en juego?
Estudiar, por mucho que diga la gente desinformada, es una actividad que exige mucho esfuerzo. Quizá más que muchos trabajos remunerados. Y es que el arte de superar exámenes no es, casi nunca, innato. Requiere práctica, atención, y esfuerzo.
En primer lugar, siempre, se presenta el escollo de los exámenes, pruebas en las que el alumno debe demostrar destrezas habiéndose preparado antes. ¿No es, a veces, altamente trabajoso, superar una prueba escrita?
Lo es, y además depende de muchos factores. Otro tipo de trabajos destinados a la consecución de títulos académicos pueden ser, las actividades realizadas “en casa”, trabajos y ejercicios.
Con esto ¿No puede decir mucha gente que trabaja?
A pesar de todo esto no es éste el único trabajo que realiza el hombre fuera de las actividades de pago.
Seguramente, si tiene a cargo una familia, sabrá perfectamente de lo que le hablo. Organizar una familia para fomentar la armonía, evitando las reminiscencias de los malos sentimientos puede ser algo intenso y trabajoso, para lo que se necesitan grandes dotes, y para lo que hay gente, que no está preparada.
Siendo así ¿No están de alguna manera todos los padres, madres, abuelos, tíos etc realizando un trabajo al cuidar de su familia?
El cuidado de la familia, o incluso, de uno mismo lleva aparejado otro tipo de labor, casi igual de importante que la anterior, que es, las actividades domésticas.
El “trabajo doméstico” es una actividad que todo padre y madre de familia debe realizar. También toda persona que trabaje por su cuenta.
Se ha insistido mucho sobre la equidad sexual en el reparto de estas tareas. No obstante, en lo que se debería insistir más es en la “des-rol-ización” de la mujer, como persona que sólo sirve para tareas domésticas, que es la principal causa de que en estas cuestiones la igualdad no sea aún plena.
Una mujer debe trabajar lo que un hombre, ni más, ni menos.
A nivel personal, también nos podríamos ocupar de otras muchísimas actividades, que, con remuneración o sin ella, contribuyen al fomento de la actividad humana, como pudieran ser, asociaciones, partidos, clubs, ocio, etc
Pero sería alargar mucho el texto y no pretendo eso.
Lo que si pretendo es fomentar la ocupación de mis lectores, porque, aunque parezca que se nos recuerda a menudo, se nos olvida con más facilidad.
El trabajo gratifica, el trabajo contribuye a aumentar la autoestima del trabajador, el trabajo mejora habilidades. El trabajo nos hace humanos.
Siendo así, en vez de verlo como una carga, deberíamos fomentarlo. Porque, aunque no lo queramos ver, forma parte de la esencia de la felicidad.