Como la ficción puede superar a la ficción si ésta se convierte en realidad...

Erase que se eran en una ciudad prototípica, en un barrio prototípico, en una calle prototípica un par de tiñalpas llamados fulanito y menganito (imagínese como son xD).

El caso que nos ocupa es que estos dos señores después de salir de su trabajo en una fábrica líder en "sófguer" se instalan en su casa, miran con atención la televisión y escudriñan la oferta del "práim táim", es entonces cuando sintonizan la serie líder de audiencia entre adolescentes y pre-pajilleros varios "Necesita Mejorar"; una insólita novela sobre un colegio privado en el que los alumnos deben competir por ser los más populares y proto....normales posible. Los chavales demuestran grandes dosis de belleza externa, porque de inteligencia andan más bien "escasicos"

Las "niñas" son las típicas chonis paletas de supermercado con aros en las orejas digamos de un tamaño como de aquí a la segunda luna de Saturno, dando recorrido para ir, tomarse un par de cañas en el bar espacial de Zutano y volver.

El caso es que estas muchachas, con sus homólogos masculinos los bakalas tiñalpiformes más preocupados porque la gomina les sujete el pelo que llevan encima de esa cabeza que no usan que de aprobar Matemáticas, y que ni de lejos, saben, que es el Álgebra de Boole, si que saben a su edad lo que es la vida, una tremenda basura.

Estos cretinos, observados y escudriñados cuasicientíficamente por fulanito (menganito que quieren que les diga yace tumbado en el sofá, casi mortecino, fulminado salvajemente por la "entradilla" de la serie), con sus relacciones ora gregarias, ora grupales (entiéndase por grupales que forman grupos más pequeños) tienen una vida y obra de mírame y no te menees: Abortos, embarazos, suicidios, fracaso escolar...

Ríete tu de los culebrones sudacas, estos ya habían inventado antes el cronismo amarillista de los informativos de Antena3. Volviendo a fulanito y a su interesante vida, el individuo sale a la calle y piensa en su hijo de 14 años. Que mundo señores, si es que la ficción supera a la ficción se lamenta el panoli.